Resurgiendo de las cenizas - Capítulo 276
✨ Nuevas novelas cada semana, y capítulos liberados/nuevos tres veces por semana.
💬 ¿Tienes una novela en mente? ¡Pídela en nuestra comunidad!
🌟 Únete a la comunidad de WhatsApp
📱 Para guardarnos en tus favoritos, toca el menú del navegador y selecciona “Añadir a la pantalla de inicio” (para dispositivos móviles).
Capítulo 276:
🍙🍙 🍙 🍙 🍙
La retransmisión en directo se volvió loca, inundándose de comentarios.
«¡La señorita Morgan es demasiado generosa!».
«Después de todo lo que ha pasado, ¿todavía llama a Maia su hermana? ¡Estoy llorando de verdad!».
«¡Maia ni siquiera merece ser pariente de Rosanna!».
«Olvídalo. Maia no va a aparecer. ¡Probablemente esté demasiado envidiosa para venir!».
Rosanna parpadeó, con los ojos brillantes por las lágrimas que no conseguía contener.
El momento conmovió a todos, tanto a los asistentes al evento como a los espectadores en línea.
La voz de Rosanna temblaba con un toque de vulnerabilidad. «Ha habido muchos malentendidos entre mi hermana y yo. Quiero aprovechar este momento para arreglar las cosas. Si no aparece, seguiré esperando. En mi corazón, ella sigue siendo importante, y mi fiesta de compromiso no estará completa si ella no está presente».
Los invitados se emocionaron visiblemente y colmaron a Rosanna de elogios por su amabilidad y generosidad.
Sandra, por su parte, no tenía intención de dejar que Maia apareciera. Rápidamente le hizo una señal a Jarrod para que interviniera y convenciera a Rosanna de que dejara de esperar.
Jarrod se acercó a Rosanna y le habló con suavidad. «Rosanna, dejemos de esperar, ¿de acuerdo? Tú sigues viéndola como tu hermana, pero ella no. Ya no forma parte de nuestra familia. Estás preciosa hoy y estás a punto de casarte con el hombre que Maia amó en su día. Si Maia aparece, solo hará que las cosas sean incómodas para ella».
Sandra añadió, con tono sarcástico: «Aunque Maia fuera tan descarada, no se atrevería a aparecer hoy. ¿Qué podría hacer? ¿Quedar en ridículo?».
Richard, ahora más tranquilo, se acercó y le dio una palmada tranquilizadora en la mano a Rosanna. —Rosanna, no te estreses. No importa si Maia aparece o no. Esta noche es toda tuya. Todos están aquí por ti.
Encuentra más en ɴσνєʟα𝓼4ƒ𝒶𝓷.ç𝓸m antes que nadie
—No hay motivo para esperar —dijo Vince con voz suave mientras miraba a Rosanna—. Pase lo que pase, no cambiará nuestra felicidad. Rosanna, no hagamos esperar a todos demasiado, ¿de acuerdo?
Rosanna bajó la mirada, pero por dentro no pudo evitar esbozar una sonrisa fría.
Qué pena que Maia no apareciera. Estaba deseando humillarla delante de todos. Todos instaron a Rosanna a que actuara y, tras un momento de vacilación, finalmente asintió con renuencia.
Rosanna levantó la cabeza, respiró hondo y cambió su incertidumbre por una amplia y generosa sonrisa. «Vale, basta de esperar. Empecemos», dijo.
Dicho esto, rodeó con el brazo a Vince y se dirigieron hacia el escenario.
De repente, una voz clara y fría resonó en el salón de banquetes.
«Rosanna, ¿me estabas esperando?».
Todos los presentes se volvieron al unísono, atónitos, hacia la entrada.
Era Maia.
Había aparecido.
Maia llevaba un vestido que brillaba como las estrellas, tan mágico que parecía haber salido directamente de un sueño.
El corte elegante de su vestido y la tela brillante que reflejaba la luz la hacían resplandecer más que cualquier estrella del cielo. Era impresionante.
Se hizo el silencio en toda la sala. Maia había venido de verdad. El público de la retransmisión en directo se incorporó, con toda su atención puesta en Maia.
Su vestido era increíble.
Hasta ese momento, todos habían creído que el vestido de alta costura de Rosanna era lo más destacado de la noche. Pero ahora, junto a Maia, el vestido de Rosanna parecía apagado en comparación.
.
.
.