Multimillonario desalmado: Nunca debió dejarla ir - Capítulo 772
✨ Nuevas novelas cada semana, y capítulos liberados/nuevos dos veces por semana.
💬 ¿Tienes una novela en mente? ¡Pídela en nuestra comunidad!
🌟 Únete a la comunidad de WhatsApp
📱 Para guardarnos en tus favoritos, toca el menú del navegador y selecciona “Añadir a la pantalla de inicio” (para dispositivos móviles).
Capítulo 772:
🍙🍙 🍙 🍙 🍙
Su pantalla se redirigió al instante y esas tres desgarradoras imágenes llenaron la pantalla.
Otra vibración volvió a llamar su atención. Eugene le había enviado otro mensaje, logrando de alguna manera hacerse con los archivos originales antes de que fueran eliminados. El mensaje contenía tres archivos adjuntos: un aviso de estado crítico y dos fotografías inquietantes.
Las manos de Brandon no dejaban de temblar.
Millie apenas se aferraba a la vida.
Había perdido mucha sangre.
De repente recordó que ella tenía sangre Rh negativo y le entró el pánico al preguntarse si el hospital había actuado con la suficiente rapidez. ¿Qué podía haber provocado esto? ¿Cuándo había ocurrido? ¿Cómo se habían puesto tan mal las cosas? ¿Por qué no recordaba nada de esto y cómo era posible que estuviera tan desinformado?
En esas fotos parecía que se estaba muriendo. ¿Cómo había podido pasar por alto algo tan grave?
Las cosas entre Millie y Nicole siempre habían sido tensas. Solo unos meses antes, antes de que se formalizara el divorcio, él seguía siendo el marido de Millie. Si hubiera habido un aviso de estado crítico, él debería haber sido el encargado de firmar los documentos, pero no recordaba en absoluto que eso hubiera ocurrido.
Brandon estaba completamente desconcertado.
No perdió tiempo y volvió a llamar a Eugene. La línea se conectó de inmediato.
—¿Sr. Watson?
La voz de Brandon era inestable. «Aclara esto. ¡Necesito saber la verdad, ahora mismo!».
«¡Ahora mismo!», respondió Eugene sin dudar.
Tu serie favorita sigue en ɴσνє𝓁α𝓼4ƒα𝓷.ç♡𝓂
Después de terminar la llamada, Brandon sintió que estaba a punto de derrumbarse. Quería hacer algo, cualquier cosa, pero no tenía ni idea de por dónde empezar. Una oleada de miedo e impotencia amenazaba con engullirlo por completo. Las lágrimas cayeron sobre su teléfono, empañando la pantalla hasta que Brandon recordó de repente el aviso.
Amplió la imagen, tratando de entender el aviso de estado crítico, pero la mayor parte de la información, la fecha y los detalles estaban borrosos. Solo se podía leer el nombre de Millie. Sin embargo, el sello del hospital aún era visible: Crobert Hospital.
Eso sugería que Alexia y Giffard podrían tener respuestas.
En cuanto se le ocurrió esa idea, Brandon se apresuró a marcar el número de Alexia. Al otro lado, Alexia ya estaba pegada a su teléfono, ya que acababa de ver la publicación.
Reconoció la escena al instante. Mostraba lo que había sucedido después de que Brandon empujara a Millie por las escaleras: la tragedia que les había costado la vida del bebé que ella llevaba en su vientre.
Quienquiera que hubiera tomado esas fotos seguía siendo un misterio, pero Alexia sospechaba que podría haber sido algún paciente al azar o su familia. Después de todo, el caos de ese día había llamado mucho la atención.
Absorta en sus pensamientos, el teléfono de Alexia se iluminó de repente. Brandon la estaba llamando.
Una sonrisa burlona se dibujó en los labios de Alexia cuando descolgó.
—Alexia, ¿has visto esas fotos de Millie que están circulando por Internet? —La voz de Brandon sonaba frenética en cuanto ella respondió.
«Las he visto», respondió Alexia, con un tono increíblemente tranquilo.
.
.
.