Multimillonario desalmado: Nunca debió dejarla ir - Capítulo 611
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Capítulo 611:
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Millie parpadeó y volvió a la realidad. Sonrió y asintió con la cabeza.
«De acuerdo», dijo, con los ojos llenos de lágrimas.
Puso su mano sobre la de él.
El dron siguió transmitiendo y la multitud estalló en vítores.
Myron le cogió la mano con firmeza y le deslizó el anillo en el dedo. Era un brillante diamante azul que centelleaba bajo el sol, a juego con el colgante que descansaba en su clavícula.
Él la conocía perfectamente.
Sabía que había muchas cosas que le importaban: la muerte de su padre, Ari y la familia Bennett. Sabía que no siempre sería lo primero en su vida. Pero no le importaba y seguía a su lado.
Myron se puso de pie, sin soltar su mano izquierda.
Fue entonces cuando Brandon finalmente llegó hasta ellos.
Él miró sus manos, entrelazadas con fuerza, y el anillo que descansaba en el dedo de ella. El sol calentaba, pero ningún calor tocaba su piel. Solo frío.
—Millie —la llamó Brandon, con los ojos enrojecidos.
Pero Millie no respondió. Su única respuesta fue apretar aún más fuerte la mano de Myron.
Brandon abrió la boca para hablar, pero ella no lo miró. Sus ojos permanecieron fijos en Myron. Ya había dicho todo lo que tenía que decir.
—Vete —dijo Millie finalmente—. Brandon, ahora cada uno tenemos a alguien a quien queremos. Mira hacia adelante. Aférrate a las personas que están a tu lado. Deja de hacer daño a quienes te quieren, como me lo hiciste a mí.
Era lo último que tenía que decirle. Después de eso, no quedaba nada más que decir.
Brandon volvió a abrir la boca, pero los guardias de seguridad del Grupo Elliott intervinieron y lo sujetaron.
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Millie sonrió, miró a Myron a su lado y, juntos, cogidos de la mano, tomaron otro camino.
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