Multimillonario desalmado: Nunca debió dejarla ir - Capítulo 280
✨ Nuevas novelas cada semana, y capítulos liberados/nuevos tres veces por semana.
💬 ¿Tienes una novela en mente? ¡Pídela en nuestra comunidad!
🌟 Únete a la comunidad de WhatsApp
📱 Para guardarnos en tus favoritos, toca el menú del navegador y selecciona “Añadir a la pantalla de inicio” (para dispositivos móviles).
Capítulo 280:
🍙🍙 🍙 🍙 🍙
Entre bastidores, en el camerino, Millie ya había terminado de prepararse. Era la semifinal: esa noche, la mitad de los seis concursantes serían eliminados y solo los tres mejores continuarían.
De pie en silencio con su teléfono en la mano, Millie volvió a leer el mensaje que Vivian acababa de enviar a la cuenta de Serena. «Esta noche es tu última oportunidad».
Levantó la mirada y vio a Vivian charlando con Brandon, con una sonrisa empalagosa en el rostro.
Desde aquella amarga discusión, Millie y Brandon no habían intercambiado ni una sola palabra. Brandon no había hecho ningún esfuerzo por acercarse a Millie y Millie, por su parte, fingía que él no existía.
Ahora no eran más que desconocidos, una ruptura limpia que hacía mucho más sencilla la perspectiva de firmar los papeles del divorcio en tres días.
Charles terminó de dar algunas instrucciones y luego dudó antes de abrirse paso entre el público para alcanzar a los hermanos Elliott.
La familia Elliott ni siquiera había participado en el programa como inversora hasta ayer, cuando se incorporaron en el último momento. Habían perdido la oportunidad de participar en los beneficios, así que aceptaron un puesto como anunciantes.
Más anuncios, ya fuera en la retransmisión en directo o en la edición posterior, significaban que su marca estaría en todas partes.
La jugada de la familia Elliott no fue precisamente sutil. Como una de las tres potencias de Crobert, su control sobre el mercado de las piedras preciosas y los artículos de lujo hizo que su patrocinio llamara la atención al instante.
Como todo había sucedido de forma tan repentina, Charles quería averiguar cuáles eran sus verdaderas intenciones.
Después de intercambiar algunas palabras amables, se dirigió hacia el backstage, pero justo cuando pasaba por la fila de Brandon, este lo llamó.
Encuentra más en ɴσνє𝓁α𝓼4ƒ𝒶𝓷.c○𝓂 de acceso rápido
Vivian ya se había escabullido para prepararse, así que Brandon estaba sentado solo, con la mirada fija e indescifrable.
Charles se acercó con paso firme, sin molestarse en ocultar su desdén. «¿Necesitas algo?», preguntó secamente, sin hacer ningún esfuerzo por parecer amistoso.
Brandon captó el tono hostil de Charles y frunció ligeramente el ceño.
«¿Cuál es exactamente tu relación con Millie?». Su mirada era aguda, implacable, buscando en el rostro de Charles cualquier atisbo de verdad. «¿Y Serena? ¿Qué pasa realmente entre vosotros dos?».
Charles casi se echó a reír.
Quería espetarle: «No es asunto tuyo», pero se contuvo y reprimió su temperamento. «Eso no es algo que necesites saber».
—Millie es mi esposa —declaró Brandon, pronunciando las palabras con fuerza deliberada.
Charles soltó un breve suspiro de incredulidad. Ya no podía contenerse más. Miró a Vivian, que aún estaba visible al otro lado de la sala, y señaló con el dedo en su dirección. «Entonces, ¿quién se supone que es esa?».
Su tono rezumaba sarcasmo, y su fingida sorpresa no lograba ocultar su desprecio.
¿Cómo demonios se atrevía Brandon a decirle eso?
.
.
.