Mi esposo millonario: Felices para siempre - Capítulo 623
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Capítulo 623:
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Collin era su marido, no el fundador.
En el rostro de Carol se dibujó una sonrisa de satisfacción al ver la reacción de Linsey.
«¿Qué se siente, Linsey? ¿Estás disfrutando de esta pequeña sorpresa?» se burló Carol.
La incredulidad nubló la mirada de Linsey. Esta noticia parecía totalmente imposible.
Lentamente, sacudió la cabeza, dispuesta a recuperar el control.
Ante la aguda mirada de Carol, Linsey respondió con firmeza: «Esto es imposible. Estás mintiendo».
Carol soltó una carcajada burlona. «Pobre Linsey, casi te compadezco. Te he dicho la verdad y sigues aferrándote a sus mentiras».
Sus palabras calaron hondo, haciendo que los labios de Linsey temblaran y el color de sus mejillas se desvaneciera.
¿Podría ser cierto?
¿Era Collin realmente el misterioso fundador de CR Corporation?
Linsey siempre había albergado algunas dudas en el pasado.
Ella se había enfrentado a Collin varias veces, y cada vez, él negó firmemente cualquier implicación con CR Corporation.
Recordó su pregunta inicial sobre su conexión con la empresa y recordó su afirmación de que debía cien millones a CR Corporation.
Su confusión sólo se profundizó después de descubrir la aparente amistad de Collin con Dustin.
Collin había explicado que su relación tenía su origen en un incidente que salvó la vida de Dustin.
A lo largo de todas estas explicaciones, Collin había sido directo y serio, dejando a Linsey convencida de su honestidad.
Respirando con calma, Linsey declaró: «Carol, basta de mentiras. ¿De verdad crees que soy tan fácil de engañar? Tus palabras no significan nada para mí».
Collin era el hombre al que amaba y en el que confiaba con todo su corazón.
¿Por qué iba a creer más a un forastero que a su propio marido?
Carol entornó los ojos, claramente sorprendida por la inquebrantable confianza de Linsey en Collin.
Incluso ahora, Linsey decidió creer en él.
Para Carol, esa fe ciega no era más que una tontería.
Carol esbozó una sonrisa de satisfacción y señaló a Alexa, que esperaba cerca.
Momentos después, Alexa le entregó a Linsey una fotografía.
La reacción de Linsey fue inmediata e intensa. Se quedó sin aliento al reconocer las dos figuras familiares de la imagen.
La foto mostraba a dos distinguidos hombres de pie, uno al lado del otro, ambos exudando un aire de autoridad.
Uno de ellos llamó su atención de inmediato.
Collin, inconfundiblemente, aparecía en la foto llevando el mismo traje que la propia Linsey había diseñado y confeccionado para él.
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