Marcada por el Verdadero Alfa - Capítulo 118
✨ Nuevas novelas cada semana, y capítulos liberados/nuevos tres veces por semana.
💬 ¿Tienes una novela en mente? ¡Pídela en nuestra comunidad!
🌟 Únete a la comunidad de WhatsApp
📱 Para guardarnos en tus favoritos, toca el menú del navegador y selecciona “Añadir a la pantalla de inicio” (para dispositivos móviles).
Capítulo 118:
🍙 🍙 🍙 🍙 🍙
«De acuerdo, me parece un buen plan», acepta Zeo.
«Mientras vosotros estáis ocupados con eso, voy a llevar a Freya al laboratorio para que me ayude a identificar esos elementos desconocidos, así podremos empezar a buscarlos. Los vamos a necesitar para la cura», dice Lena.
«De acuerdo, pero eso puede esperar hasta mañana. Acabas de volver. Tómate el día libre y pásalo con los niños. Zeo y yo iremos a buscar a la persona que recibió las páginas», sugiero.
«De acuerdo, gracias», responde ella.
«Muy bien, Zeo, vámonos», digo, y nos levantamos de nuestras sillas.
«Freya, ¿te queda bien quedarte aquí?», le pregunto a mi hermana.
«Por supuesto, y si hay sitio para mí, me gustaría quedarme aquí durante mi visita», responde ella.
«Por supuesto que hay sitio para ti, Freya», le dice Lena.
«¿Estás evitando a la malvada loba del oeste?», pregunta Zoey con una sonrisa burlona en el rostro.
«Algo así», responde Freya.
«No te culpo. Tiene suerte de que yo esté encerrada en esta casa todo el día. Si no, las cosas que he imaginado hacerle… Sé que es una mujer lobo y que sin duda me dominaría, pero me aseguraría de darle unos cuantos golpes buenos primero», dice Zoey.
No, estas dos juntas son como el fuego y la gasolina.
«Muy bien, por favor, compórtense. No se den ideas», les digo.
Zeo y yo salimos, pero no se me escapa el beso que le da a Zoey en la mejilla ni el hecho de que ella no se queja ni lo aparta cuando lo hace.
Justo cuando estamos a punto de salir por la puerta principal, oigo unos pequeños pasos detrás de mí. Me doy la vuelta y veo que es Karla.
«¿Adónde vas, jefe?», me pregunta. Dios, es tan mona, y todavía no puedo creer que Lena y yo la hayamos creado. Es perfecta. Los tres son perfectos.
Disponible ya en ɴσνєℓα𝓼4ƒ𝒶𝓷.c○𝓂 con lo mejor del romance
«Hola, señorita. Tu tío Zeo y yo tenemos que ir a buscar algo», le digo.
«¿Es para la cura de los niños enfermos?», pregunta.
«Sí, es para la cura», le respondo.
Ella respira hondo, cierra los ojos y yo me quedo confundido, sin saber qué está pasando. Luego abre los ojos y tiene una enorme sonrisa en el rostro.
«Tu corazón late con calma y firmeza, lo que significa que dices la verdad. Hasta pronto, Leo», dice, y luego me abraza las piernas y corre de vuelta al salón.
«¿Qué demonios acaba de pasar?», le pregunto a Zeo, que no parece confundido en absoluto.
«Sus habilidades están empezando a manifestarse. Zoey dijo que siempre pensaron que sería así. La noche que se marcharon, fue cuando ocurrió. Estaba muy asustada, así que se lo expliqué y luego le enseñé cómo saber si alguien miente o dice la verdad. Lena me va a matar por eso», dice.
Sonrío, con una gran sonrisa en mi rostro, porque mi hija está desarrollando sus habilidades. Pero también estoy triste y dolida por no haber estado allí.
«Gracias, tío. Me alegro de que estuvieras ahí para ella», le digo a Zeo, y lo digo en serio.
«¿Lo sabe Lena?», le pregunto mientras nos subimos al coche.
«No, no lo sabe. Zoey decidió no decírselo para que no se sintiera mal por haberse ido y habérselo perdido, pero se lo va a decir hoy», responde, y yo asiento con la cabeza.
«Oye, tío, no te desanimes por esto. Aún le quedan muchas habilidades por descubrir, y los chicos ni siquiera han empezado todavía. Tú estarás ahí para todo eso», dice, tratando de animarme.
.
.
.