Los Secretos de la Esposa Abandonada - Capítulo 794
✨ Nuevas novelas cada semana, y capítulos liberados/nuevos tres veces por semana.
💬 ¿Tienes una novela en mente? ¡Pídela en nuestra comunidad!
🌟 Únete a la comunidad de WhatsApp
📱 Para guardarnos en tus favoritos, toca el menú del navegador y selecciona “Añadir a la pantalla de inicio” (para dispositivos móviles).
Capítulo 794:
🍙 🍙 🍙 🍙 🍙
En el gran vestíbulo, Melany se quedó a distancia, con la mirada fija en la zona interior, donde un intercambio inusual llamó su atención. Algo en la escena le pareció extraño.
«Colton, ¿te has dado cuenta de que la mujer que recibió esas rosas me resultaba familiar?», dijo en voz baja, con un deje de curiosidad en la voz.
Melany había estado prestando más atención de la que pretendía. Después de todo, acababa de enterarse de que el hombre de cabello plateado no era otro que el director del Laboratorio Fleeingland, y la mujer que estaba a su lado le provocaba una extraña sensación de reconocimiento. La respuesta de Colton fue desdeñosa. Apenas miró en dirección a la mujer antes de encogerse de hombros.
«Se parece un poco a la investigadora que nos recibió en la sala de recepción del instituto de investigación aquel día».
Al oír esto, Melany frunció el ceño, y una imagen inquietante pasó por su mente: Alice. Pero algo no cuadraba; no era una coincidencia perfecta. Sus pensamientos se vieron interrumpidos cuando la mujer se dio la vuelta y subió la escalera. Su elegante silueta irradiaba una presencia imposible de ignorar.
«Pero Colton, ¿por qué siento que se parece tanto a Allison?». Melanie frunció el ceño y sus palabras se desbordaron antes de que pudiera detenerse.
Sus palabras tocaron la fibra sensible. En el momento en que se mencionó el nombre de Allison, todo el comportamiento de Colton cambió. Ansiaba ver a la verdadera Allison, no solo una sombra que se le parecía vagamente.
«No puede ser ella. Verruckt no tiene nada que ver con ella, y ahora está con Kellan», dijo con una risa amarga. Colton sabía que Allison lo odiaba tanto. Incluso si ella estuviera aquí, no tendría nada que ver con él.
Después de todo, ella había dejado claro que sus caminos nunca volverían a cruzarse.
«Y da igual que esa mujer se parezca a Allison o no, ¿qué más da? Aunque sea ella la que organice el banquete, no tiene nada que ver con nosotros».
Colton entendía que Allison no quisiera verlo. Había borrado todo contacto y lo había bloqueado por completo. Después de su divorcio, descubrió que Allison había sido decisiva, y una vez que se decidía, no había vuelta atrás.
Nunca volvería a ocuparse de él. Al ver la incomodidad de Colton, Melanie dudó antes de preguntar en voz baja: «Colton, ¿qué pasa?».
En el fondo, oírle desestimar a Allison le dio una extraña sensación de alivio. Aun así, no podía evitar la sensación de que él no había superado realmente la situación.
—Estoy bien —murmuró Colton, bebiéndose el whisky de un trago. La frustración era evidente en cada uno de sus movimientos.
En las sombras, su rostro se iluminó con un destello de autocrítica. Él era quien había alejado a Allison. No tenía a nadie a quien culpar más que a sí mismo.
Mientras tanto, Allison no sabía que Colton estaba en el mismo edificio. Siguió a Verruckt hasta el último piso.
«La habitación 1901 es tuya», dijo Verruckt, entregándole la tarjeta de acceso. Una sonrisa se dibujó en sus labios mientras admiraba el ramo de rosas que sostenía. «Estas flores te sientan muy bien», añadió.
.
.
.