Los Secretos de la Esposa Abandonada - Capítulo 758
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Capítulo 758:
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Al oír esto, Allison dirigió deliberadamente la conversación, eligiendo cuidadosamente sus palabras. «Sí, se tarda bastante en desarrollar algo así», dijo. «Pero nuestro jefe lo pidió hace tiempo, así que ya tenemos algo listo en el laboratorio». Su tono se mantuvo tranquilo mientras añadía con una sonrisa: «Ahora está en su oficina. Ambos conseguiréis sin duda lo que habéis venido a buscar».
Colton sintió una oleada de alivio. Aun así, había algo en su actitud tranquila que le resultaba familiar. La sensación le atormentó brevemente, pero pronto se desvaneció. Después de todo, ¿cómo podría Allison haber estado en la Isla del Diablo? Probablemente estaba deambulando por Vrining, disfrutando de un tranquilo viaje con Kellan.
En ese momento, el teléfono de Colton vibró. Al contestar, dijo: «Hola, mamá. ¿Cómo te encuentras?».
«Oh, me duele mucho la cabeza», gimió Lindy en cuanto oyó la voz de su hijo. «¡Si Allison no me hubiera empujado al agua la última vez, no estaría en este lío!».
Sus palabras resonaron con fuerza en la sala de recepción, en completo silencio. Allison, sentada cerca, actuaba como si no se diera cuenta, con una expresión tranquila e indescifrable.
Al darse cuenta de su indiferencia, Colton respondió con firmeza: «Mamá, por ahora céntrate en descansar. Me aseguraré de traerte la medicina».
Lindy, sin embargo, ignoró su tranquilidad y siguió desahogándose. «No es solo el dolor de cabeza, ¡estoy nerviosa y no puedo calmarme!». Colton sintió crecer su frustración.
—Tómate un par de pastillas para la tensión arterial por ahora —dijo con voz baja pero decidida—. Te juro que esta vez traeré la medicina.
Dicho esto, colgó.
Melany notó la tensión en el rostro de Colton y se acercó, tratando de tranquilizarlo: —Colton, no te estreses demasiado por tu madre —dijo con suavidad—. Esta vez nos aseguraremos de conseguir lo que necesitamos.
Después de hablar, su expresión se nubló de arrepentimiento mientras bajaba la mirada. «En realidad, es culpa mía que las cosas hayan salido así antes», admitió. «No debería haber provocado a Allison. Si hubiera mantenido la calma, tal vez tu madre no habría terminado en el agua».
Los pensamientos de Colton se desviaron hacia el incidente de Sunset Hill. Había demasiados cabos sueltos que no le cuadraban. —Melany, ¿qué pasó realmente en Sunset Hill? —preguntó, con un tono firme pero inquisitivo.
No podía quitarse la sensación de que, por despiadada que pudiera ser Allison, no habría actuado sin una razón.
Melany se quedó inmóvil por un momento, su cuerpo se tensó ante su pregunta. Nunca antes la había cuestionado, pero ahora las dudas empezaban a volver a aparecer.
«Colton, tal vez ella simplemente me odia y se desquitó con tu madre», dijo Melany, con voz llena de arrepentimiento. «Es culpa mía por alejarte de ella».
Su expresión era de profunda vulnerabilidad, del tipo que a menudo despertaba un impulso protector en los hombres.
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