La Venganza de la heredera - Capítulo 243
✨ Nuevas novelas cada semana, y capítulos liberados/nuevos dos veces por semana.
💬 ¿Tienes una novela en mente? ¡Pídela en nuestra comunidad!
🌟 Únete a la comunidad de WhatsApp
📱 Para guardarnos en tus favoritos, toca el menú del navegador y selecciona “Añadir a la pantalla de inicio” (para dispositivos móviles).
Capítulo 243:
🍙 🍙 🍙 🍙 🍙
Yusuf sonrió. «Hola, Mitchell. Parece que nos volvemos a encontrar».
Los ojos de Angela se iluminaron. «Mitchell, ¿os conocéis?».
Mitchell asintió. «Me pidió consejo antes».
Rebecca se quedó atónita.
Yusuf sonrió, sintiéndose algo avergonzado.
«No me malinterpretes, no tengo ningún problema psicológico. Es solo que necesitaba su ayuda para una investigación».
«En ese momento, no podía encontrar la información que necesitaba, así que tuve que pedir cita y acudir al médico».
«Mitchell fue quien me atendió».
Mitchell se echó a reír.
«Así es. Al principio, pensé que era un paciente problemático, pero quién iba a imaginar que realmente había venido para aprender».
«En ese momento le admiré y, como ese día no estaba muy ocupado, mantuvimos una larga conversación».
Angela nunca esperó establecer una conexión tan valiosa.
Pero Yusuf ni siquiera la miró.
Miró a Sandra.
«No esperaba encontrarte aquí. Acabamos de ir a tu oficina a buscarte».
Sandra le miró y luego miró a Rebecca.
Yusuf se sintió aún más avergonzado.
Rebecca también notó que algo no iba bien.
«Sandra, ¿por qué nos miras?».
Sandra siguió sonriendo. «Solo por curiosidad».
Sigue leyendo en ɴσνє𝓁α𝓼4ƒα𝓷.ç◦𝓂 para más emoción
«¿Ah?», Rebecca no lo entendía.
Sandra no reveló los pensamientos de Yusuf.
Sin embargo, todo esto enfureció a Angela.
«Sandra, deberías estar en la empresa, pero vienes al hospital por placer».
Wesley giró la cabeza y miró a Angela con frialdad. Sus ojos estaban llenos de frialdad, como si estuvieran hechos de hielo.
Angela se sobresaltó.
Inmediatamente se escondió detrás de Mitchell.
Mitchell preguntó: «Wesley, ¿no es un poco intimidante?».
«El asunto sobre el que me consultaste antes, ya tengo una solución». El tono de Wesley era frío.
«Han pasado cinco años y ahora tienes una solución. Aunque la medicación sea buena, caduca en tres años. ¿Crees que puedo confiar en ti?».
Mitchell no se enfadó a pesar de que se burlaran de él.
«Tienes razón. Fue culpa mía no poder ayudarte antes, y te pido disculpas».
Wesley respondió con indiferencia: «No pasa nada».
Joey intervino inmediatamente: «El estado de Wesley ya ha mejorado, ya no tienes que preocuparte».
.
.
.