La Venganza de la heredera - Capítulo 217
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Capítulo 217:
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Al final, el departamento de finanzas asignó 5 millones al departamento de diseño.
Joey sintió como si acabara de presenciar la novena maravilla del mundo.
¿Cuándo se había se volvió tan tranquilo? ¿Podría ser debido a la desintoxicación?
¿Sus anteriores cambios de humor se debían al envenenamiento?
Joey sintió que había descubierto un secreto extraordinario.
Después de terminar varios contratos, Wesley fue informado de que Hailey había llegado.
Para no interrumpir el trabajo de todos, eligió la sala contigua para hablar.
Hailey había quedado completamente marginada.
Aunque seguía siendo muy respetada dentro de la empresa, ya no se la temía.
Al ver entrar a Wesley, ella se burló.
«Wesley, pensaba que tu primer objetivo sería ocuparte de Debra. ¡No esperaba que fueras tú quien me destruyera primero!».
Aunque Hailey no había estado acudiendo a la empresa, seguía teniendo un firme control sobre el poder.
Desde que Wesley había regresado, su posición dentro de la empresa había comenzado a cambiar.
Al reflexionar sobre ello, un escalofrío le recorrió el corazón.
«Cuando eras niño, te quería más que a nadie. Contraté a muchos profesores para ti.
Cuando Debra se casó con la familia, te sentías solo y fui yo quien te ayudó a salir de las sombras.
Sé que no hay mucho afecto genuino en esta familia, pero siempre he creído que tú y yo estábamos del mismo lado».
Wesley claramente no quería seguir escuchando.
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«Cuidaré de ti en tu vejez, quédate tranquilo».
Los pensamientos de Hailey se aceleraron.
¿No tenía suficiente dinero?
«Wesley, me has decepcionado mucho».
Wesley levantó la mirada. «¿Qué quieres?». Sus ojos estaban llenos de indiferencia.
Hailey no quería andarse con rodeos.
Le preguntó directamente: «Conoces a Lisa, ¿verdad?».
Wesley no dijo nada, lo que podía considerarse una confirmación. Al fin y al cabo, ya era de dominio público que Sandra y Lisa eran mejores amigas.
«Lisa es propietaria de una gran empresa de corretaje. ¿Sabes a qué se dedica esta empresa?».
Hailey sonrió con desdén. «Ayudan a la gente a conectar con peces gordos».
«Esa es la razón por la que Sandra conoce a tanta gente».
«¿Qué intentas decir?».
La expresión de Wesley denotaba un toque de impotencia. Hailey no esperaba que sus palabras fueran tan claras y, aun así, él seguía sin entender.
Esto también demostraba lo bien que Sandra se disfrazaba. Incluso alguien tan inteligente como Wesley podía volverse tonto cuando estaba enamorado.
Tenía tantas incongruencias delante de sus narices, pero hacía la vista gorda.
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