La revancha de la increíble exesposa del CEO - Capítulo 154
✨ Nuevas novelas cada semana, y capítulos liberados/nuevos dos veces por semana.
💬 ¿Tienes una novela en mente? ¡Pídela en nuestra comunidad!
🌟 Únete a la comunidad de WhatsApp
📱 Para guardarnos en tus favoritos, toca el menú del navegador y selecciona “Añadir a la pantalla de inicio” (para dispositivos móviles).
Capítulo 154:
🍙 🍙 🍙 🍙 🍙
Thalassa levantó una ceja. «¿Tiene que ser ahora mismo?».
Clark asintió. «Sí. Es muy importante y no tardaremos mucho».
Ella lo pensó por un momento. «De acuerdo. Pero hace mucho frío fuera, así que necesito ponerme una chaqueta antes de irnos. Espero que no te importe esperar un poco en la sala de estar».
Clark apretó los dientes, pero esbozó otra sonrisa. No podía permitirse precipitarse ahora y hacerla sospechar.
«Claro», dijo mientras se dirigía al salón mientras Thalassa subía las escaleras.
Alden le arrebató el teléfono a Kris y le espetó: «Maldito bastardo. Sabemos que eres tú, Clark. Ya han capturado a tus hombres y te arrepentirás incluso de haber pensado en atacar a Luisa».
La línea se cortó inmediatamente. Al mismo tiempo, comenzaron a sonar las sirenas. Pronto, tres coches de policía se detuvieron alrededor del lugar. Los dos asesinos fueron esposados y detenidos.
—¿Por qué querría Clark matarte? —preguntó Zeke, con cara de total desconcierto, ya que no tenía ni idea de las sospechas que recaían sobre Clark.
—Te lo explicaré todo más tarde —le aseguró Luisa, con la voz aún temblorosa.
«Ahora mismo, tenemos que avisar a Thalassa. Me temo que Clark le hará daño ahora que va a quedar al descubierto».
«¡Joder! ¡Joder! ¡Joder!». Clark golpeó repetidamente con el puño el salpicadero de su coche.
¿Cómo habían podido fracasar tan estrepitosamente esos idiotas? Ahora él estaba en peligro. Si Akim cedía ante la presión de la policía y lo contaba todo, Clark sabía que estaría acabado. Tenía que hacer algo para protegerse.
Con eso, arrancó el coche y comenzó a conducir. Había aparcado a poca distancia de la casa de Thalassa, por lo que había visto a Luisa marcharse y había informado a sus hombres para que la siguieran.
Actualizaciones diarias desde ɴσνє𝓁α𝓼4ƒαɴ.c♡𝗺 en cada capítulo
Al llegar a la casa de Thalassa, el guardia de seguridad le permitió entrar fácilmente, ya que había estado allí varias veces antes. Después de aparcar el coche, se apresuró a ir al porche y llamó al timbre.
Unos instantes después, Thalassa abrió la puerta. —¿Clark? ¿Qué haces aquí?
—Lassa —comenzó Clark, esbozando una sonrisa tranquila—. Sé que esto es inesperado, pero hay algo muy importante que necesito mostrarte. ¿Puedes venir conmigo?
Thalassa arqueó una ceja. —¿Tiene que ser ahora mismo?
Clark asintió. —Sí. Es muy importante y no llevará mucho tiempo.
Ella lo pensó por un momento. —De acuerdo. Pero hace mucho frío fuera, así que necesito ponerme una chaqueta antes de irnos. Espero que no te importe esperar un poco en la sala de estar.
Clark apretó los dientes, pero esbozó otra sonrisa. No podía precipitarse ahora y hacer que ella sospechara.
—Claro —dijo mientras se dirigía al salón mientras Thalassa subía las escaleras.
—Estaba esperando a que mis investigadores confirmaran mis sospechas sobre ti —dijo Thalassa con frialdad—. ¿Pero intentar matar a mi mejor amiga? Eso es el colmo.
La mente de Clark se aceleró mientras procesaba la imagen de Thalassa apuntándole con una pistola. Era lo último que esperaba al venir aquí. Tenía que hacer algo para salvar la situación.
—Thalassa, ¿de qué estás hablando? No he intentado matar a nadie —dijo con voz temblorosa, aunque intentó mantenerla firme.
Thalassa se burló, entrecerrando los ojos. «Luisa me llamó para contarme lo que le había pasado en la carretera. Tú enviaste a esos hombres tras ella, y la habrían matado si no hubiera sido por Alden, Zeke y Kris».
.
.
.