La Luna de Miel - Capítulo 450
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Capítulo 450:
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Después de pensarlo un rato, no podía decidir si revelarle la verdad o no. La razón de su dilema era el enorme poder e influencia de Greyson.
A pesar de la riqueza y el estatus del misterioso hombre, Greyson reinaba como la figura más influyente en el campo de la medicina. Temía que hablar podría dar lugar a que la denunciaran ante la Asociación Médica y perdiera su licencia para ejercer la medicina. Sin embargo, su conciencia la atormentaba, ya que nunca antes había participado en actos tan engañosos.
Justo cuando estaba contemplando, su teléfono móvil sonó abruptamente.
Sobresaltada, saltó del sofá, pensando que podría ser una llamada de Greyson.
Al mirar hacia abajo, vio un número desconocido, pero vagamente reconocible.
Al principio, no pudo identificar a la persona que llamaba. Pero cuando respondió, se dio cuenta de que era el mismo hombre que había preguntado por el embarazo de Candice la otra noche. Le preguntó si había cometido algún error al determinar las semanas de gestación de Candice, lo que hizo que el corazón de Essie se acelerara por el terror. El teléfono casi se le resbaló de la mano temblorosa.
Presa del pánico, fingió que no recordaba los detalles con claridad e insistió en revisar los registros del hospital. Terminó la llamada apresuradamente.
A partir de ese momento, se mostró reacia a responder más llamadas. Se tomó una baja por enfermedad en el hospital y buscó refugio en la soledad de su hogar.
Con el paso del tiempo, su sufrimiento se intensificó hasta que llegó a un punto de ruptura.
El incesante sonido del teléfono llenaba a Essie de miedo. No se atrevía a contestar, temiendo las consecuencias de cualquiera de las dos partes implicadas.
De repente, apagó el teléfono, sacó la tarjeta SIM y la tiró al inodoro.
Mientras el remolino de agua se tragaba la tarjeta SIM, se derrumbó en el suelo. En aquel momento, abrumada por la tentadora oferta de Greyson, su juicio se había nublado, lo que la llevó a cometer un grave error. Ahora lo lamentaba profundamente.
«Lo sentimos, el número al que ha llamado no está disponible en este momento».
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Milton frunció el ceño con frustración al terminar la llamada. Había estado intentando localizar a Essie, la doctora que había supervisado el embarazo de Candice en el East Hospital.
Essie le había prometido revisar los registros de la ecografía B cuando contestó al teléfono por primera vez, pero desde entonces había sido imposible localizarla. A pesar de sus numerosos intentos, o no contestaba o había apagado el teléfono. Parecía completamente imposible encontrarla.
¿No debería haber afrontado su error con valentía, aunque hubiera calculado mal las semanas de embarazo de Candice?
¿Cuál era la verdadera razón de su repentina desaparición? Milton no podía evitar albergar profundas dudas.
En el West Hill Cafe, Greyson entró en la sala privada y vio a Essie sentada en un rincón, con una maleta a su lado.
Con el pasaporte en la mano, miraba a su alrededor con ansiedad. Cuando vio a Greyson, suspiró aliviada y se levantó para saludarlo.
—Sr. Harman, por fin ha llegado.
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