La heredera fantasma: renacer en la sombra - Capítulo 1050
✨ Nuevas novelas cada semana, y capítulos liberados/nuevos tres veces por semana.
💬 ¿Tienes una novela en mente? ¡Pídela en nuestra comunidad!
🌟 Únete a la comunidad de WhatsApp
📱 Para guardarnos en tus favoritos, toca el menú del navegador y selecciona “Añadir a la pantalla de inicio” (para dispositivos móviles).
Capítulo 1050:
🍙🍙 🍙 🍙 🍙
Lorna salió del ascensor tarareando, claramente de muy buen humor. Llevaba el paquete que le había dado Ethan, con una brillante sonrisa en el rostro.
Greta salió de la sala de descanso con un café en la mano. Al ver el buen humor de Lorna, arqueó una ceja. —¿Acabas de ir a la planta noventa y nueve?
Una sonrisa burlona se dibujó en los labios de Lorna. —Sí. ¿Qué pasa? ¿Te mueres por subir tú también?
Greta hacía tiempo que había dejado de pensar en Ethan. Un poco molesta por las palabras de Lorna, respondió con frialdad: «No, solo intentaba hacer charla».
En la oficina, sus compañeros no eran especialmente amigos de Greta, sobre todo porque se había atrevido a competir con Brenna por Ethan.
Lorna resopló y abrió la puerta del despacho de Brenna. —Señorita Harper, tengo la información que necesitaba.
Dentro, Brenna estaba enfrascada en una reunión estratégica con Joe, repasando la última oleada de problemas en los informes bursátiles del Grupo Mitchell. Ambos se detuvieron en mitad de la conversación cuando Lorna entró, con la mirada fija en la bolsa que llevaba.
Con un rápido movimiento, le pasó la bolsa a Brenna. Lorna dijo: —El Sr. Mitchell compró estos aperitivos locales en Plomond hace unos días. Dijo que están deliciosos y me pidió que se los trajera.
Brenna, intrigada, rebuscó en el contenido. «¿Qué información has conseguido?».
Joe acercó una silla e hizo un gesto a Lorna para que se sentara y contara los detalles.
Lorna se dejó caer en la silla sin perder el ritmo. —Hay mucho que contar. ¿Recuerdas cuando Gracie intentó echarnos del edificio el otro día? Pues bien, ¿adivina qué? El Sr. Mitchell no tenía nada que ver. Ella actuó por su cuenta. Cuando llegué a la planta 99, ya estaba enzarzada en una discusión acalorada con el Sr. Mitchell y tres de los vicepresidentes. Ninguno de ellos quería que ella dirigiera el nuevo proyecto. Decían que la reacción sería demasiado fuerte y que dañaría la imagen de la empresa. La discusión se prolongó durante treinta minutos antes de que Gracie saliera furiosa, con una expresión de rabia absoluta».
Se le escapó una suave risa. —Una vez dentro de la oficina, el Sr. Mitchell se tomó un momento para explicarme todo lo que había pasado. Tuve la sensación de que quería que te contara los detalles para que no malinterpretaras nada. Sinceramente, parece que se preocupa por ti más de lo que crees.
Brenna no se había dado cuenta, pero estaba sonriendo, sintiéndose muy satisfecha. Las gotas de lluvia golpeaban suavemente el cristal, pero para Brenna la lluvia solo hacía que el mundo pareciera más bonito.
novelas4fan.com tiene: ɴσνєʟα𝓼4ƒ𝒶𝓷.ç𝓸m antes que nadie
Lorna continuó: «Realmente pensé que Gracie tenía su apoyo cuando intentó echarnos. Pero ahora sabemos que no es así. Señorita Harper, no hay nada de qué preocuparse. Si se atreve a causar problemas de nuevo, no seré indulgente con ella. No somos fáciles de intimidar. Ni siquiera la propia madre del señor Mitchell pudo echarnos. ¿Qué le hace pensar a Gracie que tiene alguna posibilidad?».
Desde su asiento, Joe observó toda la conversación con una sonrisa. Era imposible pasar por alto la ardiente confianza de Lorna, y su charla siempre parecía alegrar el ánimo de Brenna. Era fácil entender por qué Brenna la tenía tan cerca.
Mientras tanto, Kenny se dirigía a casa, con cada paso cargado de fatiga. Pero en cuanto entró, el calor del apartamento recién decorado pareció aliviar parte de su agotamiento. Este lugar no era solo un hogar. Era un mosaico de recuerdos, cada pequeño detalle un símbolo de su amor.
.
.
.