Fácil fue amarla, difícil fue dejarla - Capítulo 249
✨ Nuevas novelas cada semana, y capítulos liberados/nuevos tres veces por semana.
💬 ¿Tienes una novela en mente? ¡Pídela en nuestra comunidad!
🌟 Únete a la comunidad de WhatsApp
📱 Para guardarnos en tus favoritos, toca el menú del navegador y selecciona “Añadir a la pantalla de inicio” (para dispositivos móviles).
Capítulo 249:
🍙 🍙 🍙 🍙 🍙
Stella se encogió de hombros, con una mirada cálida. —Vosotros dos organizadlo, yo me apunto.
Una vez que se cambió la ropa de trabajo, Stella cogió su teléfono y buscó el nombre de Steven.
Se dio cuenta de que últimamente había descuidado Nebula: necesitaba información actualizada sobre las últimas aportaciones técnicas y era hora de consultar con Steven si había que hacer algún ajuste o mejora.
Stella se deslizó hacia un pasillo más tranquilo y rápidamente marcó el número de Steven, pulsando el botón de llamada con el pulgar inquieto.
En lugar de su voz, una grabación sin emoción llenó su oído. «Lo sentimos, el número al que ha llamado no está disponible en este momento. Por favor, inténtelo más tarde…».
Apretó los labios, frunciendo aún más el ceño, y colgó. Dos intentos más, el mismo mensaje robótico. La ansiedad le punzaba bajo la piel.
Aún aferrada a su teléfono, Stella se dirigió hacia el dormitorio, con la mente llena de preocupaciones. ¿Le habría pasado algo a Steven? ¿Debería ir a buscarlo?
Estaba tan absorta en sus preocupaciones que apenas se percató de la persona que había dentro del ascensor cuando se abrieron las puertas. Al entrar, se quedó paralizada. William ya estaba allí.
Sus miradas se cruzaron y una corriente silenciosa pasó entre ellos.
Los ojos de William se posaron en la pantalla, donde aún se veía el nombre de Steven en la pantalla de llamadas.
Rompió el silencio con un anuncio seco. —Steven me ha encargado todos los asuntos del proyecto.
Las palabras tomaron a Stella por sorpresa. Dudó, dividida entre la confusión y la curiosidad. —Entonces… ¿eso significa que ahora coordinaré directamente contigo?
—Sí —respondió William.
Stella asintió, aunque la confusión aún se reflejaba en sus ojos.
Encuentra más en ɴσνє𝓁α𝓼4ƒαɴ.c♡𝗺 que te atrapará
—Entonces… ¿dónde está el Sr. Harrison? —preguntó con naturalidad, pero su tono delataba cierta preocupación—. He intentado llamarlo varias veces, pero me dice que no hay cobertura. ¿Está bien?
William frunció ligeramente el ceño, casi imperceptiblemente. Pero lo hizo.
—Está bien —dijo, manteniendo la voz tranquila—. Solo se ha tomado unos días de vacaciones.
¿Vacaciones?
No esperaba que Steven se tomara unos días libres de repente, no era propio de él.
—Parece que tienes muchas ganas de verlo —dijo William, mirándola de reojo.
—No, es solo… la preocupación normal por un socio —respondió Stella rápidamente, preocupada de que él pudiera malinterpretarlo.
William respondió con un gruñido bajo y escéptico que no reveló nada. Ella decidió no insistir. No tenía sentido intentar leerlo.
.
.
.