Ella se llevó la casa, el auto y mi corazón - Capítulo 1715
✨ Nuevas novelas cada semana, y capítulos liberados/nuevos dos veces por semana.
💬 ¿Tienes una novela en mente? ¡Pídela en nuestra comunidad!
🌟 Únete a la comunidad de WhatsApp
📱 Para guardarnos en tus favoritos, toca el menú del navegador y selecciona “Añadir a la pantalla de inicio” (para dispositivos móviles).
Capítulo 1715:
🍙 🍙 🍙 🍙 🍙
La voz de Damian era grave, cada palabra le costaba un esfuerzo. «Si te preocupas por ella, no dejes que se enamore de mí».
Kristian miró los arbustos de flores cercanos, con una mirada cómplice. «Díselo tú mismo».
Damian frunció el ceño, confundido. Antes de que pudiera preguntar, Nina salió de entre los arbustos, sacudiéndose las hojas. «Hablan tan despacio que se me estaban acalambrando las piernas de estar agachada».
Damian se quedó paralizado, con la mirada fija en ella, y luego miró a Kristian. No se había dado cuenta de que Nina estaba escuchando.
Kristian se encogió de hombros, tan tranquilo como siempre. —¿Y bien? ¿No tienes nada que decirle?
Nina sonrió, imperturbable. —Si eres tímido, podemos subir arriba y hablarlo. Di lo que tengas en mente.
La voz de Damian se volvió fría y distante. —Has malinterpretado lo que he dicho.
Nina ladeó la cabeza, desconcertada, y Kristian reflejó su confusión.
«Solo le estaba diciendo lo que quería oír», dijo Damian, con su máscara de calma ocultando la tensión de sus manos apretadas. «No siento nada por ti».
Nina se encogió de hombros, sin preocuparse. «Está bien».
Damian dudó, sin saber cómo responder.
«Si no lo haces, no pasa nada», dijo Nina, sentándose frente a él con una sonrisa despreocupada. « Pero tengo algo que confesarte».
Damian arqueó una ceja. «¿Qué?».
Nina lo miró a los ojos, con una mirada brillante. «Aquella noche que me quedé en tu casa, no estaba borracha. Así que, si no te gusto, tengo una pregunta».
Damian ladeó ligeramente la cabeza, a la espera. ¿De verdad fingió estar borracha?
«Si no te importo, ¿por qué me abrazaste cuando dije que quería abrazar a otra persona? ¿Cómo explicas esos comentarios posesivos de aquel día?». La voz de Nina se suavizó y sus ojos buscaron los de él.
Encuentra más en ɴσνє𝓁α𝓼4ƒαɴ.ç0𝓂 disponible 24/7
El corazón de Damian se aceleró, pero mantuvo la compostura. «Eres la ahijada de Kristian, solo te estaba cuidando».
Nina sonrió con sorna, sin creérselo. «Podías haber dicho eso. ¿Por qué me abrazaste tan fuerte? Eso es algo que se hace con alguien especial, ¿no?».
La habitación se quedó en silencio tras la pregunta de Nina, un silencio pesado e incómodo.
Damian buscó una respuesta en su mente, pero no encontró ninguna excusa válida que ofrecer.
«¿Por qué te cuesta tanto decir que te importo?», insistió Nina con palabras afiladas, provocando sus verdaderos sentimientos. «¿Te avergüenza admitir que te gusto?».
La respuesta de Damian fue breve y directa. «Sí».
Nina vio a través de su evasiva, con la mirada fija. «¿Qué hay de malo en que le guste?».
«Simplemente lo es», murmuró Damian, con el rostro impasible, ocultando cualquier indicio de sus verdaderos sentimientos. No estaba dispuesto a confesar nada.
«No he hecho nada malo», dijo Nina, tranquila pero firme. «Soy fiel a mí misma, no pierdo el tiempo con tonterías en Internet y me siento bien conmigo misma. Así que, dime, ¿de qué hay que avergonzarse?
»
Damian se quedó sin palabras. Dispuesto a dar por terminada la conversación, se levantó y se volvió hacia Kristian. «Me voy».
«Espera un momento», dijo Nina, interponiéndose entre él y la puerta, decidida a zanjar el asunto. «Aún no hemos terminado de hablar».
.
.
.