Ella se llevó la casa, el auto y mi corazón - Capítulo 1587
✨ Nuevas novelas cada semana, y capítulos liberados/nuevos tres veces por semana.
💬 ¿Tienes una novela en mente? ¡Pídela en nuestra comunidad!
🌟 Únete a la comunidad de WhatsApp
📱 Para guardarnos en tus favoritos, toca el menú del navegador y selecciona “Añadir a la pantalla de inicio” (para dispositivos móviles).
Capítulo 1587:
🍙 🍙 🍙 🍙 🍙
La mujer sonrió, con una expresión que combinaba pureza y fuerza tranquila. —No pasa nada —dijo en voz baja, colocando una mano en el brazo de Jacob—. Hablaré con él. Jacob dudó, con la mirada fija en ella durante un momento antes de asentir.
«De acuerdo».
Lawrence observó su intercambio, la fácil cordialidad entre ellos, y sintió una punzada de duda. Frunció el ceño. ¿Hablaba en serio?
«Si pasa algo, llámame», le dijo Jacob, con una voz más suave que Lawrence había oído jamás. «Estaré arriba».
Lawrence resopló, irritado. —No me pinte como un villano —dijo, cruzando los brazos—. Solo quiero hablar, no causar problemas.
Jacob le dirigió una sola mirada antes de subir las escaleras, dejando la sala de estar sumida en el silencio.
Solo quedaron Lawrence y la mujer.
Metió la mano en el bolsillo, sacó una tarjeta bancaria y se la tendió. «Dime», dijo en voz baja y conspiradora, «¿cuánto te pagó para que hicieras este papel? Di tu precio, lo triplicaré por la verdad».
Sus ojos, claros y firmes, se encontraron con los de él. «En tu mente, ¿solo puede estar con usted?», preguntó ella, con voz suave pero con un tono de acero. «¿Es tan imposible para él querer a otra persona?».
Lawrence apretó la mandíbula, sorprendido por sus palabras. No esperaba tanta dureza bajo su apariencia amable.
—Si quieres hablar de dinero —continuó ella, sacando una tarjeta de su propio bolsillo con tranquila confianza—, aquí tienes un millón. Tómalo y déjanos en paz.
Lawrence se quedó mirando la tarjeta bancaria, desconcertado por un momento.
La mujer habló con dureza, con una voz cortante como un cuchillo. «Jacob me lo ha contado todo sobre vosotros dos. No entiendo por qué crees que puedes arreglar una relación que ya está rota».
Visita ahora ɴσνє𝓁α𝓼4ƒαɴ.c♡𝗺 para ti
Lawrence pasó el pulgar por la tarjeta, y su tranquila confianza comenzó a brillar. «Lo que hay entre Jacob y yo no te incumbe».
Ella respondió rápidamente: «Yo podría decirte lo mismo».
Una leve sonrisa se dibujó en los labios de Lawrence, rompiendo su compostura.
«¿Qué te hace tanta gracia?», preguntó ella, frunciendo el ceño con desconcierto.
«Sé que Jacob y tú solo estáis fingiendo», dijo Lawrence con suavidad, con voz firme y amable. «Sea lo que sea lo que te haya contado, hay una cosa que debes entender».
Ella entrecerró los ojos, con una mezcla de duda y curiosidad en el rostro.
«El amor entre dos personas no es algo en lo que puedan meterse los demás», añadió Lawrence, con palabras amables pero firmes.
«No estamos fingiendo ni nada por el estilo», insistió ella, con tono agudo.
«¿De verdad?», preguntó Lawrence, con voz tan tranquila como un lago en calma.
«Por supuesto», respondió ella, con rapidez y seguridad.
«Entonces, apártate», dijo Lawrence, clavando la mirada en ella.
«Hice daño a Jacob en el pasado porque no tenía otra opción. Ahora estoy intentando arreglar las cosas, y espero que me dejes hacerlo».
«Dejarlo sería la mejor manera de arreglar las cosas», espetó ella, con palabras frías y directas.
Lawrence soltó la tarjeta y habló con voz firme. «Solo lo dejaría si estuviera bajo tierra».
.
.
.