Ella se llevó la casa, el auto y mi corazón - Capítulo 148
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Capítulo 148:
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Tras la aparición de los temas de actualidad, había investigado meticulosamente el paradero reciente de Freya y descubrió su encuentro con Farrah. Esta conexión le llevó a concluir, erróneamente, que Farrah había guiado las supuestas acciones de Freya.
Felipe había mencionado anteriormente que Farrah tenía una relación sentimental con otra persona y que estaba esperando un hijo.
Kristian supuso que alguien con una situación personal tan complicada daría naturalmente consejos cuestionables.
Al darse cuenta de las acusaciones de Kristian de que había investigado a fondo sus actividades tras el incidente de los trending topics, Freya decidió no dar explicaciones elaboradas.
Respondió con sencillez y franqueza: «Yo no he orquestado esto».
«¿De verdad esperas que me lo crea?».
«Kristian, ¿cuándo vas a empezar a usar tu capacidad de razonamiento crítico?». La frustración de Freya por esta discusión repetitiva era palpable. «¿Qué motivo podría tener yo para gastar recursos en colocarla en los temas de actualidad?».
Kristian dijo: «Tú crees que ella está perturbando…».
«¿Qué es exactamente lo que quieres de mí?», interrumpió Freya, yendo al grano.
Se dio cuenta de la inutilidad de mantener una conversación racional con él, era como intentar razonar con un objeto inamovible. Estaba harta de malgastar su aliento en alguien tan obstinado. ¡Qué tontería!
«Publica una disculpa en Internet», exigió Kristian, interpretando su franqueza como una admisión de culpa, lo que intensificó su irritación y su enfado. «Después, preséntate ante Ashley y sigue disculpándote hasta que te perdone».
«Sr. Shaw, creo que exigir a la Sra. Briggs que publique una disculpa pública sería contraproducente…—Gerard intervino, incapaz de presenciar ese trato injusto.
La mirada gélida de Kristian se desplazó hacia él.
Gerard se apresuró a explicar su postura. —La discusión en Internet ya está perdiendo intensidad. Si se disculpara ahora, se convertiría inevitablemente en blanco de críticas públicas.
—Ella se ha buscado esta situación —comentó Kristian con una frialdad escalofriante.
—Esa perspectiva pasa por alto la cuestión fundamental —insistió Gerard, intentando sinceramente proteger a Freya mientras buscaba un argumento convincente—. Pero…
—Gerard —interrumpió Freya, plenamente consciente de lo que él pretendía comunicar.
Entendía que, si se convertía en el centro de la atención pública, los usuarios de Internet podrían indagar en su pasado y descubrir su matrimonio con Kristian, lo que podría sacar a la luz la complicada dinámica entre Kristian y Ashley.
Prefería que Kristian ignorara estas posibles consecuencias. Gerard se detuvo.
—Tu jefe ha tomado una decisión irrevocable. Seguir insistiendo sería inútil —observó Freya con notable compostura, mirando a Kristian con una emoción indescifrable—. ¿Estás completamente seguro de que quieres que haga una disculpa pública?
—Sin lugar a dudas —afirmó Kristian, sin admitir réplica.
Freya accedió con una sencillez inesperada. —Muy bien.
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