Ella se llevó la casa, el auto y mi corazón - Capítulo 1424
✨ Nuevas novelas cada semana, y capítulos liberados/nuevos tres veces por semana.
💬 ¿Tienes una novela en mente? ¡Pídela en nuestra comunidad!
🌟 Únete a la comunidad de WhatsApp
📱 Para guardarnos en tus favoritos, toca el menú del navegador y selecciona “Añadir a la pantalla de inicio” (para dispositivos móviles).
Capítulo 1424:
🍙🍙 🍙 🍙 🍙
Jessica no lo había bloqueado por capricho. Pero sabía que si no trazaba una línea firme, no podría llevar las cosas hasta su punto de ruptura.
Melvin era cauteloso por naturaleza, propenso a pensar demasiado. Como Jack había dicho una vez, si ella no lo presionaba, él nunca estaría con ella.
«Anímate», dijo Jack, con las manos metidas en los bolsillos mientras observaba su expresión enfadada. «¿No te prometí que haría que volviera arrastrándose? Lo decía en serio».
—¿Y si no puedes cumplirlo? —preguntó Jessica, con la confianza mermada.
—Entonces me casaré noblemente contigo —dijo Jack con un guiño—. No estarías precisamente conformándote.
Jessica le dio una patada rápida. —Piérdete.
—Hay suficientes mujeres haciendo cola para casarse conmigo —dijo Jack, tan engreído como siempre.
Yana puso los ojos en blanco y lo siguió al ayuntamiento.
En cuanto entró, sus pensamientos se desviaron hacia cómo había imaginado casarse con Melvin algún día.
Jack se dio cuenta de su mirada distante y le entregó el certificado de matrimonio falso que había preparado. —Toma, nuestro certificado de matrimonio.
«¿Qué tengo que hacer ahora?», preguntó Jessica con tono seco.
«No mucho. Solo dame una de tus tarjetas de acceso», dijo Jack, poniéndose finalmente serio. «Le dijiste a Melvin que ahora vivimos aquí, así que tengo que pasarme de vez en cuando para mantener las apariencias».
Jessica sacó una tarjeta y se la entregó. «El código de la puerta es mi fecha de nacimiento».
«Anotado», respondió Jack, guardándola en el bolsillo.
Después de quedarse en la oficina un poco más de lo necesario, se marcharon juntos.
Úʟᴛιмσѕ ĉнαρᴛєяѕ єɴ ɴσνєʟa𝓈4ƒαɴ.ç0m
En cuanto salieron del ayuntamiento, Jack se volvió hacia ella. —¿Te apetece tomar algo?
—No —respondió Jessica sin dudarlo.
«Vamos, llamaré a Haley también», insistió Jack. Por muy molesto que pudiera ser, a veces su sentido de la oportunidad era extrañamente considerado. «Es tu primer día oficial como mujer con el corazón roto».
«De verdad que no sabes cuándo callarte», respondió Jessica, irritada por la palabra «desolada».
«Lo digo en serio», dijo Jack, sonriendo como siempre. «Cuéntame más sobre Melvin».
—Era mi compañero de clase —dijo Jessica.
«No me importa el pasado», interrumpió Jack. «¿Qué es ahora?».
Jessica lo miró y respondió: «Presidente del Grupo Internacional Anita».
Jack se quedó helado. «Estás bromeando».
«¿Te parezco del tipo bromista?», dijo Jessica con calma.
Jack se quedó pensativo. «Entonces creo que sé por qué no se compromete, aunque es obvio que le gustas».
Jessica lo miró fijamente. —¿Por qué?
«Es el director de Anita International. Si tan solo insinúa que está soltero, las mujeres harán cola desde cinco condados de distancia», dijo Jack, ahora más serio a pesar de su tono habitual de informalidad. «¿Renunciar a todo el mar por un solo pez? Algunos lo llamarían una tontería».
.
.
.