El arrepentimiento de mi exesposo - Capítulo 772
✨ Nuevas novelas cada semana, y capítulos liberados/nuevos tres veces por semana.
💬 ¿Tienes una novela en mente? ¡Pídela en nuestra comunidad!
🌟 Únete a la comunidad de WhatsApp
📱 Para guardarnos en tus favoritos, toca el menú del navegador y selecciona “Añadir a la pantalla de inicio” (para dispositivos móviles).
Capítulo 772:
🍙🍙🍙🍙 🍙
La escena de Briley corriendo en su ayuda y su débil voz resonaron en la mente de Sadie.
La pregunta la atormentaba: ¿Por qué la salvaría Briley?
Pronto, el coche llegó al hospital.
Sadie corrió hacia el servicio de urgencias.
El ominoso resplandor de la luz roja fuera de la sala de urgencias le dio un tono sombrío.
Se detuvo en la puerta, con sus sentimientos convertidos en una compleja red.
Dos horas más tarde, las puertas se abrieron y salió un médico con bata blanca y aspecto cansado.
Se quitó la mascarilla y, al ver a Sadie junto a la puerta, soltó un fuerte suspiro. «Señorita Hudson, hemos hecho todo lo posible por la señorita Wall. Por ahora está estable».
Hizo una pausa, con expresión grave.
«Sin embargo, la herida era profunda y los órganos vitales estaban afectados. Aunque el rescate fue oportuno, es probable que sufra graves secuelas a largo plazo. Necesitará…»
«El reposo y los cuidados continuos son esenciales y, francamente, su recuperación parece complicada». Las palabras del médico eran una verdad difícil de aceptar.
Sadie asintió, su expresión ilegible.
«Gracias. Por favor, trasládela a una habitación privada y asegúrese de que tenga un cuidador cualificado en todo momento. Wall Group correrá con todos los gastos».
Las acciones de Briley, independientemente de sus razones, habían sido para protegerla, y Sadie sentía la obligación tanto racional como emocional de apoyarla.
La doctora acusó recibo de sus instrucciones y fue a hacer los arreglos necesarios.
Justo en ese momento, Samuel, que se había ocupado del caos en el hotel, llegó.
Se acercó con el rostro serio.
«Sra. Hudson», empezó.
Sadie se encaró con él.
«¿Qué ha encontrado?»
Samuel habló en tono bajo. «El asesino no habla, pero hemos hecho algunos progresos. Hemos encontrado un importante ingreso en su cuenta bancaria pocos días antes del incidente de hoy. Los fondos procedían de uno de los hombres de Coyle, alguien conocido por gestionar su trabajo sucio. Parece que Coyle estaba detrás de esto».
Esta revelación no sorprendió a Sadie.
Un brillo frío apareció en sus ojos, y sus labios se torcieron ligeramente con desdén. Coyle, incluso en su estado debilitado, continuó con sus planes, rebajándose a contratar a un asesino a sueldo.
Un hombre tan despreciable.
En ese momento, cualquier simpatía que Sadie pudiera sentir por Coyle se evaporó.
.
.
.