El arrepentimiento de mi exesposo - Capítulo 440
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Capítulo 440:
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«¿No es Kyla la amada de Noah? ¿Por qué no ha venido él mismo?». «¿Podría ser todo solo un rumor?».
Esos susurros punzaron los oídos de Kyla, que se sonrojó de humillación. Respiró hondo, reprimiendo su frustración, y se volvió hacia Samuel con voz firme. —¿Dónde está Noah? ¿Por qué no está aquí?
Samuel respondió con una expresión de pesar: —El señor Wall tiene un asunto urgente que atender.
—¿Qué asunto tan urgente? —espetó Kyla entre dientes.
Había puesto todo su corazón en planear meticulosamente su banquete de cumpleaños, esperando con impaciencia la llegada de Noah. Sin embargo, en lugar del alegre encuentro que había imaginado con Noah, se enfrentaba a una decepción aplastante. ¿Cómo podía soportar esta humillación?
Samuel se inclinó ligeramente, con un tono de pesar en la voz. —Lo siento, señorita. No conozco los detalles. Sus palabras fueron como una bofetada.
A su alrededor, los invitados comenzaron a susurrar, con miradas llenas de burla.
—Parece que la señorita Wade no es tan importante para el señor Wall como ella creía.
—Pensaba que eran muy amigos. Supongo que no.
—Deberíamos irnos. Aquí no pasa nada interesante.
Uno a uno, los invitados pusieron excusas para marcharse. El salón de banquetes, antes tan animado, pronto quedó envuelto en un silencio inquietante.
Kyla se quedó paralizada, con el rostro pálido como un fantasma.
Vivi se acercó con pasos deliberados, sus tacones resonando sobre el mármol. Su expresión delataba un atisbo de desdén, apenas disimulado por la preocupación.
—¿Estás bien, Kyla? —preguntó Vivi, con un tono empapado de falsa compasión mientras le daba una palmadita en el hombro—. No te lo tomes a pecho. Quizá el señor Wall tenga algún asunto urgente que atender.
Kyla levantó la cabeza de golpe, con los ojos encendidos.
—He oído que ha despejado su agenda para hoy —siseó.
Algo indescifrable cruzó el rostro de Vivi. Se detuvo, fingiendo darse cuenta de algo. —Ah, hoy parece ser el día de los padres en la guardería a la que va el hijo de Sadie.
La confusión se apoderó del rostro de Kyla.
La voz de Vivi era casual, pero tajante. —Quizá… ¿el señor Wall ha ido a la guardería?
A Kyla se le cortó la respiración.
¡Imposible!
Sacudió la cabeza violentamente, como si intentara ahuyentar ese pensamiento aterrador. Una ola de incomodidad le recorrió el pecho y apretó los puños con fuerza, clavándose las uñas en las palmas.
—Tengo que verlo con mis propios ojos —murmuró entre dientes, dando media vuelta y dirigiéndose a toda prisa hacia el vestuario.
Vivi observó su partida con una fría sonrisa en los labios.
Impulsada por la curiosidad y sin nada mejor que hacer, Vivi decidió seguirla y ver cómo se desarrollaba el drama.
Kyla se cambió rápidamente a un atuendo sencillo, cogió su bolso y salió apresurada del vestíbulo. Condujo por las calles con los pensamientos sobre Noah y Averi dando vueltas en su mente.
No podía perder. No podía dejar que Sadie le quitara a Noah.
El sol brillaba con fuerza, banderas de colores ondeaban al viento y el sonido de las alegres canciones de los niños llenaba el aire del jardín de infancia.
Noah entró en escena, con su atuendo informal que no restaba nada a su sofisticación innata. Su llegada llamó la atención de muchos padres, e incluso las jóvenes profesoras se sorprendieron a sí mismas echándole miradas furtivas.
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Nota de Tac-K: Excelente inicio de semana lindas personitas, Dios les ama y Tac-K les quiere mucho. (ɔO‿=)ɔ ♥
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