Destinos entrelazados - Mi bebé es hijo del CEO - Capítulo 441
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Capítulo 441:
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«¿Acaso te propusiste decir disparates hoy?» bromeó Sofía.
«Relájate, amiga. Que tu día sea relajado.»
Después de arreglárselas, lograron recoger la orina para la prueba.
Poniendo las dos pruebas sobre el lavabo, Sofía se asustó con el gritito que dio Kate al ver el resultado positivo.
«¡Dije que esta boda será la más comentada de todas! Centrarás todo sobre el embarazo en el altar, ¿verdad?»
«¿Realmente crees que debería hacer eso?»
«Apuesto a que Ethan se emocionará tanto que es peligroso, se desmayará.»
«Qué tontería. Por si acaso, le pediré a Mateo que se quede detrás de él cuando hagas el anuncio.»
«Hablando de Mateo, debe estar con Ethan, ¿no?»
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«Seguramente, parece que esos dos se volvieron mejores amigos. Fuimos nosotras las que insistimos en esa amistad, ¿recuerdas?»
«Ahora que se despegan un poco…» se carcajeó.
«En unos días eso sucederá, porque ustedes terminaron posponiendo el viaje a México, solo por nuestra boda.»
«Ay, amiga. Estoy feliz de que me vaya a mudar, pero sé que te extrañaré tanto.»
Kate y Sofía se abrazaron llorando, porque, por más que estuvieran felices, sabían que la distancia dificultaría un poco la amistad.
«Nos veremos pronto en tu boda, no te olvides de eso,» dijo Sofía, conteniéndose para no arruinar el maquillaje.
Cuando la música de entrada de la novia comenzó a sonar, Sofía apretó con fuerza el brazo de su padre.
«No te preocupes, hija, papá está aquí», dijo él, tratando de tranquilizarla.
Al ver a Ethan en el altar, tan guapo como si lo viera por primera vez, su corazón latió con fuerza y hasta sus manos temblaron. «Papá, por el amor de Dios, no me dejes», pidió ella, sintiendo sus manos sudar.
Caminando lentamente por la pasarela espejada, montada en el jardín de la ceremonia que Ethan eligió cuidadosamente, Sofía vio a todos los invitados allí. Divisó a Aurora, los hijos de Oliver, a toda su familia de México, como su hermana, sobrinos y cuñado, también vio a algunas tías cercanas.
Cerca del altar, vio a sus suegros, que parecían muy felices con aquella boda. En el lugar también había algunos amigos y socios de Ethan.
Cuando se acercó al novio, oyó a su padre susurrar al oído de él:
«Cuida bien de mi niñita.»
Ethan asintió.
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