Destinada a mi gran cuñado - Capítulo 137
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Capítulo 137:
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«Quedemos por la tarde para empezar a trabajar en el proyecto», dijo la chica.
Sophia se preocupó. Tenía que trabajar en la oficina. Quedar por la tarde era imposible.
«Bueno, ya sabes que ahora mismo estoy trabajando en una empresa. No puedo quedar por la tarde».
La chica puso los ojos en blanco, sin mostrar ningún interés por las palabras de Sophia.
«¿Y tú, Bruce?».
«Si ella no va a venir, ¿por qué iba a ir yo?».
Sophia miró a Bruce, pero él la ignoró.
La chica se levantó y miró a su novio.
«No le demos prioridad al proyecto, ya que dos de nuestros miembros no están activos».
Bruce frunció el ceño y dijo
«Dividamos el trabajo en dos partes. Sophia estará en mi equipo. Yo trabajaré con ella».
«¿Perdón?», dijo Sophia.
La chica asintió a Bruce. «Buena idea», coincidió su novio.
Sophia se levantó. —¿Hola? Yo también soy miembro de este grupo. No pueden decidir nada sin mí.
Bruce se levantó y respondió: —La mayoría manda, nena.
Sophia lo empujó y se bajó del banco. —Haz lo que quieras.
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Mientras salía del aula, Bruce la siguió.
—Sophia.
—No me sigas.
Él la agarró de la mano y la giró hacia él. —¿Puedes escucharme, por favor?
—¿Qué?
—Solo lo dije porque sabía que no podías adaptarte a su horario.
—Vale, ¿y cómo se supone que voy a adaptarme al tuyo?
—Puedes. Llámame cuando termines de trabajar. Trabajaremos en el proyecto entonces.
Sophia se quedó atónita. ¿Hablaba en serio? ¿Por qué haría eso?
De repente, Bruce bajó la cabeza y dijo: «Lo he pensado mucho».
«¿Sobre qué?», preguntó ella, confundida.
Él levantó la vista y dijo: «No te molestaré más».
Sophia levantó las cejas, sorprendida. «¿Lo dices en serio?».
Luego sonrió. «¡Oh! ¡Qué buena noticia! Me alegro mucho».
Él la miró fijamente durante un momento y luego le tendió la mano.
«Seamos amigos, Sophia. Quizá eso ayude a aliviar la tensión entre nosotros».
Con el paso de los días, la vida de Sophia comenzó a cambiar.
Ya no era la chica tensa y preocupada de antes. Ahora sonreía con alegría, hablaba con dulzura y se mostraba siempre alegre.
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