Deja que te lleve el corazón - Capítulo 606
✨ Nuevas novelas cada semana, y capítulos liberados/nuevos tres veces por semana.
💬 ¿Tienes una novela en mente? ¡Pídela en nuestra comunidad!
🌟 Únete a la comunidad de WhatsApp
📱 Para guardarnos en tus favoritos, toca el menú del navegador y selecciona “Añadir a la pantalla de inicio” (para dispositivos móviles).
Capítulo 606:
🍙 🍙 🍙 🍙 🍙
««Te he echado mucho de menos, cariño», dijo Joseph, tratando de atraerla hacia sí.
«Suéltame, Joseph», espetó Norene, empujándolo para mantenerlo a distancia.
Ignorando sus protestas, Joseph cerró la puerta. Sus ojos brillaban con una sonrisa pícara.
«Hemos dormido juntos muchas veces antes. ¿Por qué te comportas ahora con tanta modestia? Si acaso, estás aún más irresistible».
Norene, harta, lo miró con ira. —¿Qué quieres? —exigió.
Joseph se adentró en la habitación y sonrió con aire burlón. —¿No quieres saber lo que Lorenzo ha estado haciendo a tus espaldas?
Sus palabras hicieron que el corazón de Norene diera un vuelco.
Ya sabía lo de la aventura de una noche de Lorenzo con Mona, su antigua secretaria. Él había jurado que no volvería a verla.
¿Se trataba de Mona después de todo?
Sin decir una palabra, Joseph le lanzó un sobre. Norene lo agarró y lo abrió. Dentro había un montón de fotos comprometedoras.
Todas mostraban a Lorenzo en momentos íntimos con Mona.
Su furia se encendió mientras miraba las imágenes, apretándolas con tanta fuerza que casi las arrugaba.
Lorenzo le había estado mintiendo todo este tiempo.
Incluso ahora, como miembro de la influyente familia Palmer, Norene no podía entender por qué él seguía traicionándola con otra mujer.
—Además de las fotos, hay algo más que te puede interesar —dijo Joseph con voz engreída mientras sacaba un documento. Era el resultado de una prueba de embarazo. Norene frunció el ceño. —¿Mona está embarazada? ¿Cómo es posible?
Joseph le puso una mano firme en el hombro. —No ha sido fácil conseguirlo —dijo—. Pero es auténtico. Por una vez, Norene no se apartó de su contacto.
Sigue leyendo en ɴσνє𝓁α𝓼4ƒαɴ.c♡𝓂 sin censura
—Este es el marido al que has sido tan fiel —insistió Joseph, con tono burlón—. Mientras tú le eres leal, él te engaña. Dime, ¿realmente lo vale?
La mente de Norene se llenó de pensamientos inquietantes. Si Mona daba a luz al hijo de Lorenzo y este acababa haciéndose con el control de la familia Hughes, ¿no acabaría ese niño compartiendo la fortuna de la familia con su propio hijo?
Mientras Norene estaba distraída, Joseph se acercó y empezó a desabrocharle la ropa.
Mientras le desabrochaba los botones, le habló en voz baja. —Norene, siempre supe que aún sentías algo por mí. No te preocupes. Aunque hayas tenido un hijo de Lorenzo, lo criaré como si fuera mío».
Esas palabras sacaron a Norene de sus pensamientos. Empujó a Joseph con fuerza repentina.
Joseph parecía a punto de estallar de ira, pero antes de que pudiera decir nada, Norene lo interrumpió. «Haz algo por mí y esta noche te dejaré en paz».
Una sonrisa astuta se dibujó en el rostro de Joseph. «Tú lo has dicho», respondió él, con tono travieso.
Mientras Mona se dirigía al trabajo, casi se adentra en la calle sin darse cuenta de que un coche se acercaba a toda velocidad.
.
.
.