Deja que te lleve el corazón - Capítulo 574
✨ Nuevas novelas cada semana, y capítulos liberados/nuevos tres veces por semana.
💬 ¿Tienes una novela en mente? ¡Pídela en nuestra comunidad!
🌟 Únete a la comunidad de WhatsApp
📱 Para guardarnos en tus favoritos, toca el menú del navegador y selecciona “Añadir a la pantalla de inicio” (para dispositivos móviles).
Capítulo 574:
🍙 🍙 🍙 🍙 🍙
Lo que más la sorprendió fue que estos dos parecían seguir enredados el uno con el otro, como si no les importara que Lorenzo descubriera su pasado.
La mirada de Joseph se desplazó hacia los fragmentos de cristal que había en el suelo. Se agachó y recogió uno. Sus ojos se abrieron de par en par mientras lo examinaba. —Esto es un Lafite de 1950 —exclamó, alzando la voz—. ¡Vale casi cien mil!
Volviéndose hacia Waylon y Gracie, gritó con el rostro desencajado por la ira. —Esto es culpa vuestra. Esas dos botellas juntas cuestan doscientos mil. Hoy me las vais a pagar.
Los labios de Gracie esbozaron una leve sonrisa, casi divertida. —Oh, sin duda hay que compensarlo. ¿Qué opinas, señorita Bailey?
Norene parecía consternada, con una expresión que oscilaba entre el pánico y la culpa. Su voz temblaba cuando se volvió hacia Waylon. —Waylon… ¿Por qué has vuelto?
Los espectadores intercambiaron miradas de sorpresa. La reacción de Norene ante Waylon dejó a la mayoría de ellos atónitos e incrédulos.
—Norene, ¿por qué le tienes tanto miedo? —preguntó Joseph, con voz llena de incredulidad.
Las manos de Norene temblaban mientras espetaba: «¡Cállate! Es mi tío político».
El rostro de Joseph pasó por una serie de expresiones: primero duda, luego incomodidad y, finalmente, un atisbo de preocupación. ¿Tío político? ¿Cómo podía este hombre tener ese título? Norene pertenecía a la conocida familia Palmer. Eso significaba que su tío político también debía de ser alguien poderoso. Joseph empezó a entrar en pánico. ¿Qué debía hacer ahora?
Waylon se dirigió directamente al sofá, con paso firme y seguro. Se sentó con pesadez y se tiró del cuello con irritación. «He oído que esta villa es tuya. ¿Es cierto?».
Norene se volvió hacia Joseph y le lanzó una mirada acusadora. Si hubiera sabido la verdad, nunca les habría dejado entrar.
Historias completas solo en ɴσνєℓα𝓼𝟜ƒα𝓷.ç◦𝓂 antes que nadie
Forzando una sonrisa tensa, se dirigió a los presentes. —Esta villa pertenece a mi tío político. Todo es un malentendido.
Volviéndose hacia Waylon con tono cauteloso, añadió: —Waylon, yo no les he dicho que esta villa es mía. Quizá lo hayan entendido mal. Por favor, no te lo tomes a pecho.
Waylon entrecerró los ojos y miró con frialdad a Joseph. —¿Qué historia se han inventado?
Norene respondió rápidamente, con la voz ligeramente temblorosa: —Waylon, Joseph es un amigo mío. Estaban rodando cerca y, como creía que ya te habías ido, los invité a entrar para que se calentaran.
Gracie no pudo resistirse a hacer un comentario sarcástico: —Realmente no se ve como una extraña, ¿verdad, señorita Palmer? El propietario no está aquí y usted está aquí, organizando una fiesta sin permiso, ¿no es así?
Norene miró a Gracie con irritación. ¿Era imposible que Gracie se callara por una vez?
—La idea de entrar en calor no es inaceptable, a menos que ustedes dos quieran hacerlo en el dormitorio. Por cierto, ¿dónde están Lorenzo y Floyd?
Un rubor se extendió por las mejillas de Norene. ¿Gracie había descubierto algo? Norene no tenía intención de responderle, pero la mirada penetrante de Waylon la obligó a hacerlo.
Con un suspiro, respondió: —Ha habido una emergencia en casa. Lorenzo se llevó al abuelo y yo me quedé para ayudar a Waylon a cuidar de la villa».
.
.
.