De Exesposa Humilde a Magnate Brillante - Capítulo 1203
✨ Nuevas novelas cada semana, y capítulos liberados/nuevos dos veces por semana.
💬 ¿Tienes una novela en mente? ¡Pídela en nuestra comunidad!
🌟 Únete a la comunidad de WhatsApp
📱 Para guardarnos en tus favoritos, toca el menú del navegador y selecciona “Añadir a la pantalla de inicio” (para dispositivos móviles).
Capítulo 1203:
🍙 🍙 🍙 🍙 🍙
El mensaje de Dylan apareció directamente en la pantalla que Davina sostenía en sus manos. Una enorme sonrisa de diversión se dibujó en su rostro mientras leía el dulce mensaje.
¿Quién hubiera imaginado que Dylan, normalmente frío y serio, enviaría un mensaje tan adorable y cariñoso?
Claro, este tipo de mensajes eran completamente normales entre personas que estaban saliendo, pero viniendo específicamente de Dylan, parecía sorprendentemente anormal.
A Davina le resultaba casi imposible relacionar al chico que había escrito ese bonito mensaje con el Dylan severo y profesional que ella conocía.
Sintió que se le enrojecían las mejillas por la vergüenza, aunque se recordó a sí misma que no había sido su intención invadir su privacidad. Había visto el mensaje por casualidad.
Davina seguía sonriendo para sus adentros cuando, de repente, el teléfono de Christina empezó a sonar en su mano, haciéndola sobresaltarse.
Naturalmente, el identificador de llamadas mostraba el nombre de Dylan. Era evidente que se había impacientado esperando una respuesta por mensaje de texto y había decidido llamar.
Davina se detuvo un segundo, sopesando sus opciones, antes de decidir finalmente contestar la llamada.
En cuanto se conectó la llamada, la suave y gentil voz de Dylan llenó su oído.
—Chrissie, ¿has visto lo que está circulando por Internet? ¿Por qué no me has respondido? ¿Estás bien?
Su voz era tierna y estaba llena de preocupación genuina, del tipo que podría derretir incluso el corazón más frío.
novelas4fan.com tiene: ɴσνєℓα𝓼4ƒα𝓷.ç0𝓂 sin interrupciones
A Davina se le erizó la piel y no pudo evitar soltar un pequeño grito de sorpresa.
Era casi imposible relacionar al Dylan frío y distante que ella conocía con esa voz cálida y tierna que estaba escuchando en ese momento, y tuvo que hacer un esfuerzo para no echarse a reír. Aun así, soltó una risita ahogada, ya que toda la situación le parecía absolutamente divertida.
Quizás era la dramática diferencia entre su típica personalidad fría como el hielo y la forma en que se comportaba con Christina lo que hacía que fuera tan entretenido de presenciar.
O tal vez era simplemente la felicidad que sentía al ver que Christina finalmente encontraba la verdadera alegría y el amor después de todo lo que había pasado, al verla con alguien que se preocupaba genuinamente por ella y la trataba como si fuera importante.
—¡Tú no eres Chrissie! ¿Quién eres? —La voz de Dylan se volvió instantáneamente fría como el hielo, su hostilidad tan aguda y cortante que Davina prácticamente podía sentirla irradiando a través del teléfono.
«¡Lo siento mucho, señor Scott! ¡Soy Davina, Christina está en la ducha ahora mismo!», soltó Davina apresuradamente, con la voz temblorosa por el pánico.
La pesada y sofocante hostilidad al otro lado de la línea le provocó un escalofrío de inquietud. Sabía que si no aclaraba la situación de inmediato, tal vez no sobreviviría al peso de su furia.
.
.
.